"Existe un paraíso adentro y alrededor tuyo en este mismo instante; y para estar allí, no necesitas hacer ni un solo movimiento, ni siquiera levantar los ojos de esta página. Puedes abrirte a la perfección del diamante en todo lo que ves y sientes. Si no crees que esto pueda ocurrir con tanta facilidad, limítate entonces a ser amoroso en cada instante, y confía en que este estado vendrá a ti."
La primera vez que alguien me habló de este libro, gané mi primera moneda recitando poesía en el paseo de la Concha de San Sebastián. Creo que era un septiembre del 2002, iba sin un chavo, se acababa de morir mi tía Ramona (la de la felicidad sencilla) y yo tenía esa necesidad de expandirme y de hacerme permeable. En esas circunstancias, conocí a Fran, un poeta ambulante con el que compartí muchas tardes atemporales y que llevaba consigo a todas partes las fotocopias de este libro. Unos papeles que yo había ojeado por encima, un misticismo de andar por casa, sin gravedad, divertido, con sentido del humor.
Siempre tenemos que parar atención al equipaje no circunstancial de un trotamundos.
Este libro de Thaddeus Golas, lo estuve buscando fascinada por el título. Hoy, por casualidad, lo he encontrado. Y es que, amigos míos, existe una manera de llegar al Nirvana sin abandonar nuestra pequeña golfería cotidiana. Existe una iluminación para los que nunca harán voto de castidad, ni dejarán de fumar, ni se irán de ascetas por los bosques, etcétera.
Este libro de Thaddeus Golas, lo estuve buscando fascinada por el título. Hoy, por casualidad, lo he encontrado. Y es que, amigos míos, existe una manera de llegar al Nirvana sin abandonar nuestra pequeña golfería cotidiana. Existe una iluminación para los que nunca harán voto de castidad, ni dejarán de fumar, ni se irán de ascetas por los bosques, etcétera.
Espero que os aproveche tanto como a mí.