[Las sirenas de los sueños, de MAGA DE CARABÁS]
Sentí que hacíamos un pacto.
Un pacto para que la mente no sea laberinto, para que el dolor existencial pueda brindarnos el aprendizaje que encierra, tras su gestión.
"Hay golpes en la vida, ¡yo no sé!"Hay golpes en la vida que son inevitables, no se pueden evadir.
La sociedad está llena de anestesistas, físicos y psicológicos: el dolor es un tabú.
Pero el dolor te abre una puerta: esa puerta es el dolor de toda la humanidad. Quien es capaz de resistirlo emocionalmente, posee el poder de contribuir a la sanación de la especie. Hemos de enfrentarnos a ese dolor con el corazón abierto. Hemos de estudiarlo y hacer experimentos para ver cómo integrarlo, transmutarlo, alquimizarlo; porque el dolor tiene sentido.
Si la vida es sueño, es
justo que paseemos por veredas auténticas, que descubramos en la
dificultad los tesoros que se brindan a los que no se rinden.
Si
alguna vez te sientes triste, puedes compartir conmigo tu pena, no como
si fuera una lepra infecciosa, sino como si fuera la llave de una
puerta secreta que revela conocimiento.