viernes, 5 de septiembre de 2014

AGUA



AGUA

I

Si la música fuese un ahora
que se enreda en la mente,
¡me faltarían un espacio y un tiempo!
Prescindo de ellos.
La brisa asesina a la cárcel,
pasándola por agua.


II

Basta la lluvia. Ella es mi latido.
Los ángeles llegan.
RATZIEL me regala su libro secreto.
La lluvia es una canción para dormir. 
Es el coro celestial.
Tres voces distintas susurran a la vez:
 un sonido agudo del agua que fluye ,
 las gotas que caen sobre los charcos
y las  que  penetran en  la tierra.

Mi camino y el del mundo son el mismo.
Mis lágrimas son lágrimas del cielo.


III

Bajo esa cueva, creo dormir.
Al salir del abrigo de piedra, se extiende la Vida.
Todos los colores que se disfrazan con blanco y negro florecen.
Al fin, la niebla que ciega la retina se deja atravesar por el Amado.
Sus ojos son la ventana del niño enamorado que sonríe.
 Mis ojos… brillan como estrellas al ser espejos de su luz.

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