Es tan difícil explicar lo que sucede mientras duermo.
Mientras sueño soy a la vez Blancanieves y la bruja de la manzana envenenada.
Comprendo a la zorra que me hizo comer los testículos del árbol.
Sé por qué me desterró de su reino, sé por qué me vino a perseguir al bosque, sé por qué me intoxicó con el deseo. Perdono a la bruja que me ha matado.
Tú eres el príncipe- dragón.
He de hacer un streaptease muy largo para que no me devores.
Has de desnudarte antes que yo.
Me he muerto para que me redimas. Después, yo te redimiré a ti.
Te telepateo, mientras tanto, el camino que cruza el laberinto que lleva a mi paradero astral.
Estoy allí hechizada.
Hoy has venido a rescatarme.
Dices que han encontrado un cuento mesopotámico sobre mi vida, que mi epopeya es tan antigua como la de Gilgamesh.
Dios mío, ¿nos hemos encontrado al azar?
Tengo tanto dolor encima que no he sabido cómo decir que yo también ... lo que sea.
Yo también... lo que sea.
Tu mirada es como el fuego del Fénix.
Sé que tu beso me despertará.
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