martes, 25 de diciembre de 2007

La borracha del sexo



El distraído expande el tórax como un paraguas plegable,

todo cuanto respira se transmuta en flor y enraiza en sus pulmones,

yo amo a este payaso noctámbulo, toco a menudo sus vértebras.

Sus labios son un taxi barato.

2 comentarios:

Mawwulisa dijo...

El concentrado contrae las córneas como una medusa seca,

todo cuanto exhala conforma el humo de su cigarro y recala en sus pulmones,

yo amo la soledad noctámbula, sólo rozado solo por la oscuridad.

Mis labios son un caro y raro Spider, un viejo blasfemo nacido en los sesenta.

Sex Shop dijo...

Muy buenoooo!!!!!!