lunes, 23 de marzo de 2009

A qué precio



Dios
calcula el I.V.A.
de la vida:
y es la muerte.

Quién retribuye
el plus de terraza,
el coste del cubierto
y la buena estancia.

Vivir
con gastos pagados,
mientras puedas
robarlos.

Dios edita en Excel
la factura
catastrófica
de sueños.

Los egos,
en bacarrota,
determinan
vender acciones.

La humanidad
está en números rojos:
firmemos
un trust, un holding.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Olé! Buenísimo.

nickmazziu dijo...

Esperemos que Dios exista para que nos pague las facturas de esta vida consumista! jejeje. Yo espero de que invirtamos para salir de este mundo y llegar a otros...quizá ese el coste que tenemos que pagar para llegar a ello como vectores de la vida. Impresionante Maga tu inspiración!

nickmazziu dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Nada del Otro Mundo dijo...

¡Plas, plas! Nunca dejarás de sorprenderme.

Mawwulisa dijo...

Dios
no calcula el daño
de una vida sin suerte,
de un mal año,
de una muerte.

Quién pagará
el plus de las horas perdidas,
el coste del salario en tiempo
y la buena cama sufrida,
y la mala mesa del muerto.

Anónimo dijo...

Desterremos el capitalismo de nuestras vidas, más amor y menos golpe de nómina.

Therfer dijo...

Me has dejao pallá, Maga... ahora mismo me pongo a vender lo que tengo y me voy al bosque... un fuerte abrazo.

Tu poeta dijo...

Jajajaja, lo que dices tiene su efecto. Sigue así.